Los abscesos o fístulas son un tipo de infección provocada por las bacterias que quedan atrapadas en el área anal. Estas son habituales y pueden aparecer tanto en hombres como en mujeres.

Aparecen por numerosas razones y existen distintos tratamientos contra ellos. Un reciente estudio de la revista Dermatologic Surgery ha demostrado que la depilación láser es uno de los tratamientos más eficaces para prevenir y curar este tipo de infecciones.

Conoce qué son los abscesos o fístulas, cómo prevenirlos y los mejores tratamientos contra ellos. En Corporación Capilar te contamos todo sobre esta infección tan habitual y te planteamos la depilación láser como tratamiento alternativo.

¿Qué son los abscesos o fístulas?

Un absceso perianal es una infección que ocurre cuando las bacterias quedan atrapadas en las glándulas que recubren el canal anal. Las bacterias y el pus se acumulan y se convierten en un bulto rojo y doloroso, algo parecido a un “grano”.

Una fístula anal suele aparecer tras un absceso perianal, se trata de una infección aguda de una glándula situada en el interior del ano. En la mayoría de ocasiones la infección es espontánea, aunque puede estar asociada a enfermedades inflamatorias del intestino, como la enfermedad de Crohn o la diverticulitis.

Los síntomas de los abscesos se manifiestan con un intenso dolor e hinchazón anal, incluso es posible la aparición de fiebre. Por el contrario, las fístulas no son dolorosas, pero suele aparecer pus en la zona.

¿Se pueden prevenir las fístulas o abscesos?

Los abscesos y fístulas se pueden prevenir tomando ciertas precauciones que reducen el riesgo de padecer estas molestias. La más importante es realizar una correcta higiene del área anal tras ir al baño, siendo recomendable utilizar papel higiénico suave al tacto.

Además, es recomendable mantener una alimentación rica en fibra para evitar problemas de estreñimiento, puesto que esto puede derivar a un absceso. Y por supuesto, tomar mucha agua.

Evitar el sedentarismo, la actividad física fortalece el sistema inmune. Hacer ejercicio puede prevenir su aparición, especialmente si se pasa mucho tiempo sentado.

Y por último, una de las precauciones más importantes es tomar medidas higiénicas y preventivas durante las prácticas sexuales anales.

Tratamientos médicos más habituales

En la mayoría de ocasiones, las fístulas y abscesos anales se eliminan con cirugía. En primer lugar, el profesional especializado determina que tipo de fístula es, existen fístulas simples y fístulas complejas. De este primer paso depende el plan de acción a realizar.

Las fístulas simples se eliminan con una técnica conocida como “puesta a plano” que consiste en abrir por la mitad el tejido por donde pasa la fístula para acelerar su cicatrización.

Por otro lado, las fístulas complejas, suelen ser fístulas que ya han sido operadas anteriormente, incluso que son asociadas a enfermedades intestinales inflamatorias. Este tipo necesita el uso de técnicas más sofisticadas debido a que son más complejas pues tras la operación se debe preservar la musculatura anal y sus funciones. Además, es necesario evitar una incontinencia fecal tras la operación.

Además, las fístulas se pueden cerrar con un pegamento de fibrina que se puede utilizar para sellarlas. Otros métodos son los parches de sustancias cicatrizantes, diodo láser o colgajo de avance rectal.

Las ventajas de estos tratamientos son su elevada eficacia, puesto que consiguen eliminar el problema. Sin embargo, algunas de sus desventajas son las molestias tras las cirugías, aunque moderadas, es necesario permanecer en casa hasta una completa recuperación.

Depilación láser para prevenir abscesos sacros y fístulas

Según el reciente estudio publicado en la revista Dermatologic Surgery, especializada en Cirugía Dermatológica, la depilación láser del pliegue interglúteo reduce de forma progresiva la foliculitis infecciosa, causante de las fístulas y abscesos sacros en esta zona.

El tratamiento de depilación previene la formación de nuevas infecciones en pacientes que ya han sido intervenidos por estos trastornos. Así lo demuestran estudios realizados.

Los médicos vascos destacan que muchos pacientes han encontrado en la depilación láser una alternativa no invasiva a las tradicionales intervenciones quirúrgicas y que, además, los resultados son efectivos a largo plazo.

De hecho, las personas que se han sometido a la depilación láser en la zona perianal no han tenido que enfrentarse a nuevas cirugías.

Las infecciones de abscesos o fístulas sacras más graves suelen aparecer en su mayoría en hombres de entre 15 y 40 años, que además, tienen una alta probabilidad de reincidencia tras someterse a una cirugía. Por ello, optar por la depilación láser interglútea masculina es uno de los tratamientos más eficaces para prevenir que esto ocurra.

Aunque en su mayoría aparezca en hombres, esto no quiere decir que las mujeres no sufran este tipo de infecciones. Por ello, la depilación láser interglútea femenina también es muy habitual para prevenir o reducir la probabilidad de sufrir con la aparición de fístulas.

El número de sesiones necesarias para prevenir oscila entre 3 y 11, dependiendo del quiste que se trate, el tipo de piel y el caso particular. Es importante contar con el asesoramiento de un especialista en el tratamiento que combine el láser alejandrita y luz pulsada para conseguir los resultados esperados de forma segura.

Ahora ya conoces los tratamientos más eficaces contra los abscesos y fístulas, aplica estos consejos para prevenir este tipo de infección.

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