Los resultados eran muy naturales, la técnica Fuss era un procedimiento rápido y se consideraba una de las técnicas de trasplante capilar más populares. Para los pacientes que se sometían a un procedimiento FUSS, no es necesario rasurar la zona donante.

La técnica FUSS se realizaba bajo anestesia local y tienen una tasa de satisfacción muy alta por parte del paciente. Si la pérdida de cabello está afectando su vida diaria, su confianza y su bienestar vale la pena considerar la cirugía de trasplante capilar como una solución efectiva. Aunque eso si, una técnica más moderna y avanzada como las mencionadas al principio del post.

¿Cómo se obtiene el pelo para el trasplante FUSS?

En primer lugar, se realizaba un estudio previo de la zona donante y la zona receptora. Esto era esencial para conocer la calidad, cantidad de folículos y las posibilidades de cada paciente.

En la técnica FUSS, las unidades foliculares para el trasplante se obtienen a través de un fragmento del cuero cabelludo extraído de la parte posterior de la cabeza. Para este método no existía la necesidad de rasurar.

Configuración de la zona receptora y elección de la zona donante en Técnica FUSS

Determinar la calidad y cantidad de la zona receptora es esencial, así como la elección de la zona donante. Para ello es necesario un exhaustivo estudio para extraer la tira de tejido, esto se realizaba por medio de cortes e incisiones.

Después, se debía clasificar para el implante de pelo y preparar la zona receptora para el trasplante capilar. Todo ello bajo los efectos de la anestesia local. Además, para la configuración de la zona era necesario injertar cada unidad de los folículos pilosos según el orden que habían sido extraídas.

Diferencias entre técnica FUSS y Técnica FUE

Las cirugías de injerto capilar se pueden realizar de distintas formas. Las más conocidas son dos procedimientos que disponen de una gran popularidad gracias a sus resultados naturales.

Sin embargo, existen varias diferencias entre las técnicas FUE y FUSS, tanto para el paciente como para el equipo médico.

En ambos procedimientos se implantan unidades foliculares compuestas de 1 hasta 4 cabellos. La principal diferencia está en la obtención del pelo y en el procedimiento a realizar.

Por un lado, las siglas de la técnica FUSS significan “Follicular Unit Strip Surgery”, traducido como “técnica de la tira”. Esto hace referencia a que el injerto se realizaba por tiras. En este procedimiento el cabello de la zona posterior de la cabeza era extraído para realizar el microinjerto capilar.

Esta técnica utilizaba una obtención más concentrada que en el método FUE, utiliza el 100% de las unidades foliculares diseccionadas.

Por otro lado, las siglas de la técnica FUE se refieren a “Follicular Unit Extraction”, que traducido es “Extracción individual de folículos”. En este método la obtención de la unidad folicular se obtiene mediante un rasurado, parcial o total, del área donante.

Con esta técnica, la distribución es dispersa y solo se utiliza el 30% de las unidades foliculares por centímetro cuadrado del área donante. Esto se hace para conseguir un aspecto uniforme sin sobreextracción.

Además de estas diferencias, tanto la cicatrización como el posoperatorio son distintas tras la cirugía de ambas técnicas. En el método FUSS las incisiones que se producían para extraer el cabello son más perceptibles que en la técnica FUE. Por lo tanto, esto repercute en el periodo de recuperación, siendo mucho más largo que en la técnica FUSS.

Aunque parezcan técnicas similares, la realidad es que tienen algunas diferencias esenciales. Es por ello por lo que la técnica FUSS tuvo una gran popularidad, pero hoy en día el método FUE es mucho más efectivo y utilizado gracias a las diferencias y efectividad mencionadas.

Desventajas frente a las nuevas técnicas del trasplante FUSS

A pesar de su popularidad durante años, esta técnica de extracción de la tira, conocida como FUSS, tiene algunas desventajas en comparación con las nuevas técnicas de trasplante capilar.

• Requiere un postoperatorio más duradero. Esto se debe a la incisión realizada para la extracción de unidades foliculares puesto que es necesario esperar a que se cierre de forma adecuada.
• Deja a los pacientes una cicatriz lineal en la parte posterior de la cabeza. Esta cicatriz en la zona donante es prácticamente imperceptible, pero la desventaja es que en un futuro el paciente no podrá llevar el cabello rasurado sin mostrar la cicatriz.
• Mínimo 15 días de especial cuidado tras la cirugía. Es importante tener este plazo de tiempo en cuenta para que la cicatrización sea de forma adecuada.

Por estas desventajas y por los avances de las nuevas técnicas, el método FUSS es una técnica obsoleta. La mayoría de pacientes optan por los otros procedimientos, mucho más efectivos.

De todos modos, es importante contar con la opinión de un experto para conocer la mejor técnica según tus necesidades. En Corporación Capilar de nuestra clínica injerto capilar en Madrid, clínica de injerto capilar Sevilla y la clínica injerto capilar Barcelona, ofrecemos una primera consulta gratuita para estudiar tu caso. Contacta con nosotros, estaremos encantados de ayudarte.